17 de enero de 2009

El Squonk


"El rango del squonk es muy limitado. Pocas personas fuera de Pensilvania han oído hablar de la peculiar bestia, que se dice que es muy común en los bosques de cicuta de este estado. El squonk es muy tímido de carácter y generalmente viaja cerca del crepúsculo o del amanecer. Dada su piel inadaptada, que está cubierta con verrugas y lunares, siempre está triste; de hecho se dice, por gente que están más capacitados para juzgar, que es la más morbosa de las bestias. Los cazadores que son buenos en seguir pistas son capaces de seguir a un squonk por sus lágrimas derramadas, porque el animal llora constantemente. Cuando está acorralado y la salida parece imposible, o cuando es sorprendido y asustado, puede incluso disolverse en lágrimas. Los cazadores del squonk tienen más éxito en noches de luna muy frías, cuando las lágrimas caen lentamente y al animal no le gusta salir; puede ser escuchado llorar debajo de las ramas de los oscuros árboles de cicuta. El señor J.P. Wentling, antes vivía en Pensilvania y que se mudó a Minesota, tiene una experiencia frustrada con un squonk cerca de Mont Alto. Planeó una inteligente captura engañando a un squonk e induciéndolo a saltar dentro de un bolso, el cual llevaba a su casa, cuando de repente la carga se aligeró y las lágrimas cesaron. Wentling abrió el bolso y miró adentro. No había nada, excepto un charco de lágrimas.”

William T. Cox, “Criaturas Temibles de los bosques, del desierto y las montañas” (1911).

11 de enero de 2009

El Berth

El Berth (Historia de Terror en 12 puntos)

1. Aquella tarde Robert había cerrado el portalón antes de lo habitual, sin embargo, ya Había entrado.

2. Robert era un tipo listo e intuyó la trama.

3. Cautelosamente cerró el portalón de nuevo, pero las vacas habían sido más inteligentes que él.

4. Brisbane corrió todo lo que podía, pero supo que ya estaba muerto.

5. Mientras corría pensaba que el Breth superior estaría húmedo a consecuencia de la salitre, no obstante aún permanecía completamente seco.

6. Brisbane tuvo que permanecer otra noche solitaria en el viejo 105, muy en contra de sus apetencias.

7. El trabajador examinó al Berth a las paredes y al suelo, pero cayó en la cuenta de que también él había muerto.

8. El trabajador intentó colocar cuatro tornillos dorados en el portalón, pero sabía que el Berth lo habría cogido de haberlo hecho.

9. El Capitán y Brisbane estaban determinados a encontrar la verdad, tan sólo el Berth podría detenerlos.

10. Cuando el segundo pasajero fue hacia el portalón la tempestad era tremenda y el ojo de buey se había abierto, de modo que las vacas consiguieron escapar en silencio.

11. 105 no es seguro.

12. El Capitan guardaba silencio, Brisbane acabaría como ellas; (quienes habían ganado el juego). El Berth estaba libre en el Universo.

Lunes, 9 de Febrero de 2oo4